Hoy os traemos un post para que la elección del gimnasio no sea un fracaso y convierta nuestros objetivos en sueños que jamás podremos cumplir. Para que esto no pase, prestad atención a los siguientes puntos:
- Cerca de tu casa o trabajo. Piensa primero a qué hora vas a ir a entrenar y asegurare de que eliges un centro que esté cerca del sitio dónde donde normalmente estás en ese momento. Asistir a un entreno en el gimnasio ya de por sí cuesta, imagina si tienes que coger coche o transporte público para ir.
- No busques instalaciones impresionantes. Lo más importante son los trabajadores. Asegúrese de que estén debidamente formados y solicita alguna clase de prueba (un buen gimnasio debe ofrecértelo) para comprobar que tenéis buena "química".
- Mira bien la oferta de actividades que realmente le interesan. No todas las actividades le son útiles.
- Pide referencias. Pregunta a tus amigos, vecinos o compañeros de trabajo sobre el centro. No te cortes en preguntar a alguno de los socios del gimnasio.
- Asegúrate que tiene un buen equipamiento. Es imprescindible que incluya máquinas de tonificación, de entrenamiento cardiovascular, zona de peso libre y una zona cómoda para realizar estiramientos. Si vas a realizar actividades colectivas, echa también un vistazo a esa sala.
- Busca una buena relación calidad precio, no solo respecto al equipamiento y ubicación, también con relación a la calidad de los instructores. Un gimnasio muy barato, pero en el que no te atienden bien , o que está abarrotado a la hora en la que tienes previsto asistir, no es una buena inversión.
A partir de aquí, sólo debes dedicarte a realizar la sesión de entrenamiento e ir superando los objetivos día a día.
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¡Hasta pronto amigos!
